Biden, el asesino de niños palestinos
El legado de Biden será definido y recordado para siempre por los miles de niños palestinos desmembrados por bombas fabricadas en EE.UU. en el genocidio más grande de la historia moderna.
El legado de Biden será definido y recordado para siempre por los miles de niños palestinos desmembrados por bombas fabricadas en EE.UU. en el genocidio más grande de la historia moderna.
La declaración de la directora de un centro de Lérida en el que murieron cerca de la mitad de los usuarios en 2020 vuelve a traer a la actualidad un tema dejado de lado, con la mayoría de las investigaciones archivadas y la comisión del Parlamento de Cataluña, diluida.
Quienes se atreven a protestar por una masacre histórica, una de las tantas, son, vaya casualidad, los acusados de apoyar el terrorismo. Nada nuevo. Así han procedido siempre los terroristas de Estado en todas partes del mundo, a lo largo de toda la historia y bajo banderas de todos los colores.
El impacto visual del barco-prisión es indudable, pues, cuando una piensa que a la política migratoria y de asilo europea no le queda ningún límite que traspasar, una gigantesca embarcación que recluirá a personas que soliciten protección internacional en Reino Unido, nos recuerda que la crueldad e inhumanidad de la clase política europea no parece tener fin.
En 2022, cuando los conflictos regionales volvieron a envolver al mundo, “la naturaleza hegemónica de EEUU y su bárbara, brutal y maliciosa política de poder quedaron totalmente al descubierto y la gente de todo el mundo fue más consciente de la “democracia estadounidense”, los “derechos humanos estadounidenses” y su “hipocresía y engaño””.
Los gobiernos utilizan las garantías diplomáticas para “eludir” varias convenciones de derechos humanos, y el hecho mismo de que se busquen para empezar crea sus propios peligros. “El mero hecho de que los Estados necesiten buscar garantías diplomáticas contra la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes (otros malos tratos) es indicativo de un riesgo de tortura”.
El relator en Tortura de Naciones Unidas, Nils Melzer, comunicó a Londres, Camberra, Estocolmo y Quito su inquietud por la exposición de Assange a un “severo dolor y sufrimiento, infligido mediante varias formas y grados de tratamiento o castigo cruel inhumano y degradante, que claramente constituye tortura psicológica”.
La fórmula de gobierno de los gobernantes de Arabia Saudita ha sido mantener una mano de hierro sobre las protestas y la disidencia, al mismo tiempo que modelan al príncipe heredero Mohammed bin Salman como un reformador visionario. En 2020, la misma figura petulante detrás del brutal asesinato del periodista y ciudadano saudí Jamal Khashoggi, dio señales de que se detendría un generoso recurso a la pena de muerte. Las escrituras islámicas guiarían el uso futuro de la pena capital.
Para que el derecho a internet constituya una ampliación efectiva de derechos, como en cualquier otro campo y ocasión de la historia, es imprescindible la participación decidida de los pueblos y sus organizaciones.
Si internet se convierte definitivamente en la autopista del negocio transnacional, continuarán proliferando los instrumentos de manipulación informativa, de vigilancia y control, transformando a las personas en objetos de un extractivismo de datos ilimitado.
Una de las principales herramientas disponibles y utilizadas fue la huelga de hambre. Adayfi fue alimentado a la fuerza durante años. Otras tácticas incluían negarse a salir de una jaula, negarse a responder un sinfín de preguntas ridículas, destruir todo lo que había en una jaula, inventar confesiones escandalosas de actividad terrorista durante días de interrogatorios y luego señalar que todo era una tontería inventada, hacer ruido, y protectores contra salpicaduras con agua, orina o heces.